Este miércoles, los feligreses católicos marcaron el inicio del tiempo de Cuaresma con la imposición de las cenizas, simbolizando una cruz en la frente como llamado a la paz y la comprensión. En la parroquia El Buen Pastor de la capital, decenas de religiosos se congregaron para esta celebración, invitados a ser tolerantes durante los 40 días de ayuno y penitencia.
La ceremonia, oficiada por el diácono Amado Méndez, fue también una oportunidad para que estudiantes del Centro Educativo El Buen Pastor participaran y siguieran el ejemplo de Jesús. La imposición de cenizas, con el lema «polvo eres y al polvo volverás», recordó a los creyentes su fragilidad humana y la necesidad del perdón de los pecados. Esta tradición, que se celebra entre febrero y marzo, tiene su origen en antiguas prácticas judías y ninivitas, utilizando ceniza extraída de ramas bendecidas durante el Domingo de Ramos del año anterior.
