En su decimotercera observación electoral desde 1994, Participación Ciudadana desplegó una red de aproximadamente 500 observadores en todo el país, con un enfoque especial en las grandes demarcaciones como Santo Domingo, Distrito Nacional, Santiago, San Pedro de Macorís, San Juan de la Maguana, San Francisco de Macorís, Puerto Plata y San Cristóbal, cubriendo un total de 156 municipios.
El informe aborda diversos aspectos relevantes del proceso electoral, incluyendo el ambiente general, el cumplimiento de las resoluciones de la JCE, la presencia de proselitismo político, las garantías del ejercicio del voto, la compra y venta de votos, la presencia de delegados de partidos, la puntualidad en el inicio de las votaciones, el acceso para personas con discapacidad, y el papel de la policía electoral y las autoridades.
Entre los hallazgos, se destacó que, si bien la mayoría de los colegios electorales contaban con equipos y materiales, algunos presentaban faltas de urnas u otros materiales, y una proporción elevada comenzó la votación con retraso. Se observó proselitismo político abierto en el 45% de los casos, principalmente a favor del PRM, seguido por el PLD, la FP y el PRD. Además, se identificaron violaciones a la ley electoral, como la compra y venta de votos, la realización de encuestas a boca de urna, y la realización de caravanas de motociclistas.
A pesar de estas irregularidades, el informe destaca que no ponen en cuestionamiento la calidad del proceso electoral ni la legitimidad de los resultados previsibles. Sin embargo, se reitera el llamado a vivir las elecciones como una fiesta democrática, con paz, tranquilidad y deber ciudadano.
