A seis días del trágico incendio que cobró la vida de 13 internos y dejó a 1,800 trasladados, la cárcel La Victoria enfrenta otro siniestro, aunque de menor magnitud, ocurrido la noche del sábado.
El director general de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGPC), coronel Roberto Hernández, informó que se produjo un conato de incendio el sábado en el recinto, pero fue rápidamente sofocado por los bomberos locales. Tras el incidente del lunes pasado, se ha mantenido un camión moderno y un equipo exclusivo en el penal para responder a cualquier eventualidad.
Hernández señaló que las instalaciones de La Victoria, con 72 años de antigüedad, presentan numerosos problemas en el sistema eléctrico. La Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (Edeeste) está trabajando en la instalación de nuevos transformadores y en la rehabilitación de las líneas y su distribución.
Ante esta situación, las autoridades penitenciarias han tomado medidas, incluyendo la suspensión de visitas y la restricción en la provisión de comida, medicamentos y solo permitiendo la entrega de ropas a los reclusos. Además, se ha decidido no admitir nuevos ingresos de privados de libertad en La Victoria.
La Procuraduría está gestionando la instalación de un campamento permanente del Centro de Operaciones de Emergencias (COE) en la cárcel de La Victoria, mientras se ha reforzado el equipo de investigación para determinar la causa del incendio lo más rápido posible, contando con la colaboración de otras agencias y fiscales.