La demanda presentada contra el rapero estadounidense Kanye West por parte de su exempleado, Trevor Phillips, es un testimonio alarmante que revela acusaciones graves de racismo, antisemitismo, homofobia y discriminación en el lugar de trabajo. Phillips alega haber sido objeto de discriminación, acoso y represalias directamente por parte de Kanye West durante su tiempo trabajando para Yeezy y la Donda Academy.
Entre las acusaciones presentadas en la demanda se incluyen incidentes donde West habría dirigido insultos y comentarios discriminatorios hacia personas negras, judíos y personas homosexuales. Además, se alega que West elogió a Adolf Hitler durante una cena, describiéndolo como una «buena persona» y alabando sus supuestas contribuciones a la sociedad.
Las acusaciones detallan un patrón preocupante de comportamiento por parte de West, incluyendo la promoción de retórica peligrosa frente a los estudiantes de Donda y la imposición de estándares de apariencia física discriminatorios para los empleados.
El abogado de Phillips, Carney R. Shegerian, ha expresado la esperanza de que esta demanda sirva para proteger los derechos de los empleados perjudicados y enviar un mensaje claro de que el comportamiento discriminatorio y las expresiones de odio no son aceptables en ninguna circunstancia.
Phillips busca una compensación económica por los daños que afirma haber sufrido como resultado de la discriminación y el acoso en el lugar de trabajo. La demanda pone de relieve la importancia de abordar seriamente las denuncias de discriminación y promover un entorno laboral inclusivo y respetuoso para todos los empleados.
