Los padres de estudiantes están expresando su frustración ante el método de protesta utilizado por la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) para exigir un aumento salarial del 20%. Consideran que suspender las clases como medida de presión perjudica directamente la educación y el aprendizaje de sus hijos. El paro de docencia del pasado martes fue el evento que desencadenó esta reacción, marcando un punto de quiebre para muchos padres.
La manifestación de indignación se hizo evidente con una marcha protagonizada por los padres afectados, quienes caminaron desde la Doctor Delgado hasta la avenida Simón Bolívar, compartiendo un objetivo común. Los representantes de las federaciones de padres han dejado claro que si la ADP no recurre a otros métodos de protesta, seguirán organizando iniciativas como esta. Consideran que la acción de suspender las clases representa un grave perjuicio para la educación de sus hijos, y están decididos a hacer oír su voz para buscar soluciones que no comprometan el proceso educativo.