Nueva York, 17 de junio de 2024 – Sean Combs, conocido artísticamente como P. Diddy, ha visto su reputación y reconocimientos desmoronarse en los últimos meses debido a graves acusaciones de violencia doméstica y abusos. En septiembre de 2023, el rapero, famoso por el éxito «I’ll Be Missing You», recibió las llaves de la ciudad de Nueva York, un símbolo de reconocimiento y gratitud reservado para quienes han prestado un servicio excepcional al público y al bien común. Sin embargo, tras la difusión de un vídeo de 2016 en el que se le ve agrediendo físicamente a su entonces novia, Cassie Ventura, se le ha solicitado la devolución de este honor.
El alcalde Eric Adams, respaldado por un comité, fue quien tomó la decisión de retirar el reconocimiento, asegurando que también se sintió «profundamente perturbado» al ver las imágenes. En una carta dirigida a Combs, Adams afirmó que espera que esta acción demuestre una fuerte condena a la violencia doméstica y de género, y se solidariza con todas las víctimas de estos abusos. El ayuntamiento confirmó que las llaves fueron devueltas a la ciudad el 10 de junio.
Otras Instituciones se Distancian
El impacto de las acusaciones no se ha limitado a la llave de la ciudad. Varias organizaciones y comités han comenzado a distanciarse de Sean Combs. La Universidad Howard, donde estudió entre 1987 y 1989, revocó el título honorífico que le otorgó en 2014 y eliminó su nombre de los registros oficiales de receptores de dicho reconocimiento. Además, rescindió un acuerdo de donación con el rapero, disolverá una beca establecida en su nombre, devolverá su contribución de un millón de dólares y finalizará su colaboración con la Fundación Sean Combs.
En los últimos meses, varias mujeres han presentado demandas contra Combs, acusándolo de abusos y malos tratos, lo que ha erosionado aún más su prestigio y alianzas institucionales. Este giro de los acontecimientos subraya la importancia de la responsabilidad y las consecuencias que enfrenta cualquier figura pública al ser acusada de actos de violencia y abuso.
La pérdida de estos reconocimientos refleja el firme rechazo de la sociedad y las instituciones a la violencia de género, marcando un claro mensaje de que ningún acto de este tipo será tolerado ni pasado por alto, independientemente del estatus o la fama del individuo implicado.