En Boston, sacar los botes para un lento desfile por las calles de la ciudad se ha convertido en sinónimo de la supremacía deportiva local. El desfile del viernes, que celebraba la reciente victoria de los Celtics en las Finales de la NBA, fue la última muestra de este orgullo. Los Celtics vencieron a los Mavericks de Dallas en cinco encuentros el lunes, asegurando así su supremacía con el mayor número de títulos en la historia de la liga, superando a los Lakers de Los Ángeles.
El desfile comenzó en el TD Garden y duró 90 minutos, pasando por Causeway Street frente a la arena, City Hall, Boston Common, Boylston Street y culminando en el centro de convenciones Hynes. Miles de aficionados llenaron las calles, trepando postes de luz, desplegando pancartas y parándose en las entradas del metro para ver a su equipo campeón.
Jayson Tatum, una de las estrellas del equipo, expresó su incredulidad y emoción durante un festejo en el TD Garden antes del desfile: “Es increíble, aún no puedo creer que sea real. Pero sólo intento mantenerme en el momento”.
El dueño de los Celtics, Wyc Grousbeck, tuvo un gesto especial para los aficionados antes del desfile. Intentaba llegar en auto al TD Garden con el trofeo Larry O’Brien y el banner de campeón 2024 junto a su esposa Emilia Fazzalari y sus hijos. Sin embargo, debido al tráfico, tuvo que caminar casi un kilómetro con el trofeo y el banner en la mano entre la multitud de aficionados, lo que añadió un toque memorable y personal a la celebración.
Dentro del TD Garden, los festejos incluyeron a jugadores, sus familias, integrantes de la organización, personal de la arena, aficionados con boletos de temporada e invitados especiales como la gobernadora de Massachusetts, Maura Healy, y la alcaldesa de Boston, Michelle Wu.
El desfile del viernes no solo fue una celebración del último título de los Celtics, sino también una afirmación del espíritu deportivo de Boston, una ciudad que vive y respira el éxito de sus equipos.
