SANTO DOMINGO, RD.- El Ministerio de Salud Pública ha otorgado un reconocimiento a la Fundación Nacional de Cardiología y Asistencia Médica (FUNDACAM) por su cumplimiento de las normativas y el manejo adecuado de los recursos económicos recibidos del Estado Dominicano. Este reconocimiento destaca los significativos aportes de la fundación a la mejora de la calidad de vida en sectores vulnerables del país.
FUNDACAM, presidida por el cardiólogo Tirso Roa Castillo, se dedica a la prevención y asistencia médica de enfermedades cardiacas, trabajando para reducir las muertes por infarto al corazón. La distinción, firmada por el ministro de Salud, doctor Víctor Elías Atallah Laham, resalta el desempeño y apego de la ONG a las normativas y políticas de ejecución de los recursos subvencionados por el Estado, así como sus contribuciones a la salud de la población vulnerable.
El doctor Roa Castillo expresó su agradecimiento al Ministerio de Salud por el reconocimiento y enfatizó la importancia de trabajar con dedicación y servicio para lograr grandes resultados con recursos limitados. También mencionó la esperanza de que aumenten las partidas recibidas del Estado para continuar con la prevención en salud.
Además de ofrecer servicios médicos en su sede central en Los Ríos, FUNDACAM realiza jornadas de salud en comunidades de escasos recursos económicos, donde se encuentran alrededor de un 10% de pacientes con enfermedades avanzadas o graves. Estas jornadas preventivas tienen como objetivo detectar enfermedades a tiempo y orientar a los pacientes sobre cómo mantener una buena salud.
El doctor Roa Castillo aclaró que FUNDACAM no realiza operativos médicos, sino jornadas de salud preventiva, y agradeció la colaboración de empresas como el laboratorio clínico Amadita y Caribe Tour, que facilitan el transporte del personal. Las jornadas médicas, aunque costosas, se llevan a cabo gracias al apoyo de varias empresas.
FUNDACAM es una organización sin fines de lucro integrada por un grupo de médicos especialistas que dedican parte de su tiempo a la prevención de enfermedades, promoviendo una cultura de prevención en salud para reducir los gastos del Estado en internamientos y tratamientos de enfermedades catastróficas.
