Caracas, Venezuela. La situación política en Venezuela continúa siendo un punto de alta tensión internacional. En una declaración contundente, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, afirmó: «Está claro que Edmundo González (Urrutia) obtuvo la mayoría de los votos» en las recientes elecciones presidenciales. Esta posición fue suavizada por los presidentes de México, Brasil y Colombia, Andrés Manuel López Obrador, Luiz Inacio Lula da Silva y Gustavo Petro, respectivamente, quienes mantuvieron una conversación tripartita que resultó en un comunicado conjunto dirigido al Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela.
Comunicado Conjunto de México, Brasil y Colombia
En su comunicado, los mandatarios reclamaron al CNE la publicación «expédita» de los «datos desglosados de las elecciones» presidenciales, enfatizando que «el principio fundamental de la soberanía popular debe ser respetado mediante la verificación imparcial de los resultados». Este mensaje busca equilibrar las presiones de otros países latinoamericanos que favorecen una condena más firme del gobierno de Nicolás Maduro.
El comunicado también expresa solidaridad «con el pueblo venezolano que acudió masivamente a las urnas el 28 de julio para definir su propio futuro» y reitera el «absoluto respeto por la soberanía de la voluntad del pueblo de Venezuela». Además, los presidentes de México, Brasil y Colombia han recordado su «disposición para apoyar los esfuerzos de diálogo y búsqueda de acuerdos que beneficien al pueblo venezolano».
Reacciones y Futuro Incierto
La declaración de Blinken y el comunicado conjunto de los mandatarios latinoamericanos subrayan la preocupación internacional por la transparencia y la legitimidad del proceso electoral en Venezuela. Mientras tanto, la oposición venezolana, liderada por figuras como María Corina Machado, sigue denunciando irregularidades y llamando a la movilización popular.
La comunidad internacional observa de cerca los desarrollos en Venezuela, con la esperanza de que se puedan alcanzar soluciones pacíficas y democráticas que respeten la voluntad del pueblo venezolano y pongan fin a la crisis política que afecta al país.