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Este jueves, Donald Trump sorprendió a sus seguidores en Green Bay, Wisconsin, al llegar a un mitin en un camión de basura blanco con su nombre impreso. Con un chaleco de seguridad naranja sobre su clásica camisa blanca y corbata roja, el expresidente aprovechó el momento para hacer una referencia irónica a la administración de Joe Biden y Kamala Harris. «¿Les gusta mi camión de basura?», preguntó Trump, señalando que el gesto era “en honor a Kamala y Joe Biden”.
La aparición se da en medio de una polémica desatada luego de que el comediante Tony Hinchcliffe, quien se presentó en un acto de campaña de Trump, hiciera un comentario ofensivo en el que describió a Puerto Rico como una “isla flotante de basura”. Aunque Trump no condenó directamente la declaración de Hinchcliffe, aclaró que no conocía al comediante. «Es un comediante, ¿qué les puedo decir? No sé nada sobre él», comentó al responder a los reporteros.
Las tensiones aumentaron después de que el presidente Biden respondiera a las críticas en su contra diciendo que «la única basura que veo flotando ahí fuera son sus seguidores». Aunque Biden luego intentó matizar sus palabras, el comentario generó reacciones en redes y el rechazo de seguidores de Trump.
Desde el camión, Trump reafirmó su apoyo a Puerto Rico, expresando: «Amo a Puerto Rico y Puerto Rico me ama». Finalizó su breve aparición agradeciendo a los reporteros antes de subir al escenario, donde continuó su discurso con el chaleco de seguridad aún puesto.
Este incidente se suma a las controversias que rodean la campaña presidencial de Trump en su búsqueda de retomar la Casa Blanca en las elecciones de 2024.
