|
Getting your Trinity Audio player ready...
|
San Pedro Sula, Honduras – Lo que debía ser una noche de celebración en el estadio Francisco Morazán, conocido como «La Bombonerita», terminó empañado por incidentes de violencia tras la victoria de Honduras por 2-0 ante México en el partido de ida de los cuartos de final de la Concacaf Nations League.
El partido y la tensión en las tribunas
Desde el inicio, se percibía un ambiente caldeado en el estadio, que estuvo colmado de aficionados locales. La selección de Honduras, dirigida por Reinaldo Rueda, logró un importante triunfo gracias a goles bien ejecutados que dejaron a la afición vibrando. Sin embargo, la euforia dio paso a una serie de incidentes lamentables al término del encuentro.
Agresión al técnico mexicano Javier Aguirre
Tras el pitazo final, mientras el técnico mexicano Javier Aguirre se dirigía al banco de suplentes para recoger su campera, fue impactado en la cabeza por una botella plástica arrojada desde las gradas. El golpe provocó un corte visible en la frente del entrenador, quien, a pesar de la lesión, continuó con serenidad estrechando la mano de su colega Reinaldo Rueda.
El capitán hondureño, Denil Maldonado, mostró solidaridad al acompañar a Aguirre tras la agresión, un gesto que contrastó con la hostilidad de parte del público.
Declaraciones tras el incidente
Aunque el incidente generó gran revuelo, Aguirre optó por minimizarlo en la rueda de prensa posterior al partido.
«Es fútbol y creo que el resultado del partido fue limpio», comentó el técnico mexicano, evitando ahondar en el tema.
Por su parte, las autoridades locales condenaron los hechos y se comprometieron a reforzar la seguridad para evitar que este tipo de episodios se repitan en el futuro.
Una mancha en un triunfo clave para Honduras
El triunfo de Honduras dejó a los locales con una ventaja importante de cara al partido de vuelta en México, pero el comportamiento de una parte de los aficionados empañó lo que debía ser una fiesta futbolística.
La Concacaf, que organiza el torneo, podría abrir una investigación sobre lo sucedido, con posibles sanciones para Honduras debido a la conducta del público.
El camino hacia la revancha
México buscará revertir el marcador en el encuentro de vuelta, mientras que Honduras deberá mantener la calma en un ambiente que seguramente será igual de desafiante en tierras aztecas.
El fútbol vuelve a recordarnos la necesidad de respeto y deportividad dentro y fuera de la cancha, especialmente en competencias de alto nivel.
