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Llamado a la liberación de presos políticos y apoyo a la transición democrática
Este martes, los ministros de Exteriores del G7 —un grupo de las siete democracias más industrializadas del mundo— hicieron un fuerte llamado a la liberación inmediata de todos los presos políticos «injustamente detenidos» en Venezuela. En su declaración final tras una cumbre celebrada en Italia, los ministros reafirmaron su compromiso con los esfuerzos internacionales destinados a promover una transición democrática y pacífica en el país sudamericano, que permita garantizar el respeto a la voluntad popular.
“El 28 de julio, el pueblo venezolano se ha expresado en las urnas claramente, votando por un cambio democrático y apoyando a Edmundo González Urrutia con una mayoría significativa”, manifestaron los miembros del G7, refiriéndose a las elecciones locales en las que el candidato respaldado por la oposición obtuvo una victoria considerable.
Los ministros expresaron su total apoyo a los esfuerzos de los socios regionales para facilitar una transición democrática, guiada por los propios venezolanos, que respete la voluntad de los votantes y respalde una paz duradera en el país. En este sentido, reiteraron su disposición a acompañar y apoyar los procesos políticos que conduzcan a una mejora sustancial en la situación democrática y social de Venezuela.
Preocupación por las violaciones de derechos humanos en Venezuela
Además de la liberación de los presos políticos, el G7 expresó su profunda preocupación por las “continuas violaciones y abusos de los derechos humanos” que sufren la oposición política, la sociedad civil y los medios de comunicación independientes en Venezuela. En su declaración, el grupo denunció las detenciones arbitrarias y las restricciones graves a las libertades fundamentales que se están llevando a cabo bajo el régimen del presidente Nicolás Maduro.
«Todos los presos políticos injustamente detenidos deben ser liberados», exigieron los ministros, haciendo un llamado urgente a las autoridades venezolanas para poner fin a estas violaciones de derechos humanos y garantizar el respeto por las libertades civiles.
La posición del G7 ante la situación política en Venezuela
El G7, compuesto por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, se reunió en las localidades italianas de Fiuggi y Anagni bajo la presidencia rotatoria italiana. Durante la cumbre, los ministros discutieron diversos temas de la agenda internacional, con un énfasis especial en la situación de Venezuela, que continúa siendo un punto de atención para la comunidad internacional debido a la crisis política, económica y social que atraviesa el país desde hace años.
El grupo destacó que continuará apoyando a los esfuerzos internacionales, incluyendo a los actores regionales, para ayudar a Venezuela a superar su crisis política y alcanzar una solución democrática y pacífica, sin interferir en los procesos internos del país, pero con un compromiso claro con la promoción de los derechos humanos y la democracia.
Un contexto complejo para la política en Venezuela
La situación política en Venezuela sigue siendo tensa y volátil. A lo largo de los últimos años, el país ha sido escenario de protestas, represión y graves denuncias de violaciones de derechos humanos, lo que ha generado un éxodo masivo de venezolanos hacia otros países de la región. El gobierno de Nicolás Maduro ha sido duramente criticado por la comunidad internacional por sus acciones represivas contra la oposición y la sociedad civil, mientras que sectores de la población y diversos actores internacionales siguen pidiendo un cambio de régimen que permita una restauración de la democracia en Venezuela.
El G7 y la diplomacia internacional en Venezuela
El G7 ha sido una de las principales voces internacionales en favor de una solución democrática en Venezuela, apoyando a la oposición y a la sociedad civil en sus esfuerzos por superar el autoritarismo del gobierno de Maduro. Sin embargo, la falta de avances significativos en las conversaciones entre las partes y el impacto de las sanciones internacionales han complicado los esfuerzos por encontrar una salida pacífica a la crisis.
A pesar de las dificultades, el G7 reafirmó su compromiso de seguir apoyando los esfuerzos regionales para facilitar un proceso de transición en Venezuela, con el objetivo de garantizar que las elecciones y los procesos democráticos en el país sean libres y justos, y de promover el respeto por los derechos humanos y la libertad de los ciudadanos venezolanos.
