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Santiago de los Caballeros, República Dominicana.- La Asociación de Industriales de la Región Norte (AIREN) conmemoró su 40 aniversario durante su tradicional Almuerzo Anual, reuniendo a líderes empresariales, socios, autoridades gubernamentales y representantes de diversos sectores económicos del país.
En su intervención, Juan B. Ventura, presidente de AIREN, destacó el papel fundamental de la asociación desde su fundación en 1984 en el impulso al desarrollo económico de la región norte. Resaltó los logros en innovación, exportación y apertura de mercados internacionales, y reconoció el impacto positivo de iniciativas gubernamentales como el Plan Nacional de Industrialización, el Plan Nacional de Fomento de las Exportaciones y la Ley 392-07 de Competitividad Industrial.
El desafío de la productividad
Ventura subrayó que la productividad es un reto clave para el sector industrial dominicano, señalando que el país aún se encuentra rezagado frente a economías como las de Panamá y Uruguay, según datos de la CEPAL. Propuso acciones como la inversión en tecnología, la reducción de la informalidad laboral y la igualdad de género como pasos esenciales para cerrar brechas estructurales.
“La productividad es la base para el bienestar social y la competitividad regional. Incrementarla requiere esfuerzos conjuntos entre los sectores público y privado, impulsados por la innovación, la capacitación y una cultura organizacional adaptada a los desafíos globales”, afirmó Ventura.
Conferencia de Sergio Díaz-Granados
El evento contó con la participación de Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, quien ofreció una conferencia sobre los retos y oportunidades de República Dominicana y la región. Abordó temas como la transición energética, las exportaciones y el impacto del nearshoring en el desarrollo económico.
Díaz-Granados destacó la importancia de diversificar las exportaciones y atraer inversión extranjera directa en sectores como la manufactura avanzada, la tecnología y los servicios especializados, aprovechando la proximidad geográfica del país a Estados Unidos. También subrayó la necesidad de superar barreras como la falta de infraestructura, la regulación excesiva y las brechas en habilidades laborales avanzadas.
“La integración de sectores con valor agregado en las cadenas de suministro norteamericanas, como la manufactura electrónica y de dispositivos médicos, debe ser una prioridad para el país”, afirmó Díaz-Granados.
El encuentro cerró con un llamado a la acción conjunta para construir un futuro más próspero y sostenible en América Latina y el Caribe, reiterando el compromiso de AIREN con la transformación y el fortalecimiento de la industria en la región.
