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Santo Domingo.Nicaury Elizabeth, una joven dominicana, vivió una pesadilla que duró tres años tras ser encarcelada injustamente por un crimen que no cometió. Gracias a la intervención de un grupo de abogados comprometidos, finalmente recuperó su libertad, marcando el fin de un capítulo oscuro en su vida.
Un caso de injusticia
La pesadilla de Nicaury comenzó cuando fue acusada de un delito que, según sus defensores, nunca cometió. Durante tres años, enfrentó la incertidumbre y el estigma de estar privada de su libertad mientras luchaba por probar su inocencia.
«Fue un proceso largo y lleno de obstáculos, pero nunca perdí la fe de que la verdad saldría a la luz», expresó la joven tras obtener su libertad.
El papel de los abogados defensores
La liberación de Nicaury e logró gracias al trabajo arduo de varios abogados que tomaron su caso de forma pro bono. Investigaron a fondo las evidencias y lograron demostrar ante el tribunal que la joven no tenía ninguna relación con el crimen del que se le acusaba.
«Este caso es un recordatorio de que la justicia debe ser igual para todos. Ni Cauri pasó años en prisión por una acusación sin fundamento, algo que no debería suceder en un sistema justo», declaró uno de los abogados.
Reflexión sobre el sistema judicial
El caso ha generado un debate sobre las fallas del sistema judicial y la necesidad de garantizar que los procesos legales sean más rigurosos y equitativos. Organismos de derechos humanos han llamado a una revisión de casos similares para evitar que más personas enfrenten injusticias de esta naturaleza.
Un nuevo comienzo
Nicaury Elizabeth ahora busca retomar su vida y sanar las heridas emocionales de los años perdidos. «Estoy agradecida con quienes me apoyaron. Ahora quiero enfocarme en reconstruir mi futuro y ayudar a otras personas que atraviesen situaciones similares», afirmó.
Portada Nacional seguirá dando seguimiento a historias de resiliencia y luchas por la justicia como la de Ni Cauri Elizabeth.
