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Debido a las temperaturas extremas previstas para el lunes 20 de enero en Washington D.C., la tradicional ceremonia de juramentación en las escalinatas del Capitolio se realizará en la rotonda interior del Congreso. Con pronósticos de -10 °F (-12 °C), la decisión busca proteger a los asistentes de las inclemencias del clima.
El presidente recordó un precedente similar ocurrido en 1985 durante la toma de posesión de Ronald Reagan, cuando las bajas temperaturas también obligaron a mover la ceremonia al interior del Capitolio.
Fiestas exclusivas previas al evento
Las actividades inaugurales del fin de semana estarán reservadas para un círculo selecto de donantes que han contribuido con sumas millonarias al comité inaugural. Entre los eventos figuran recepciones de gala, cenas de etiqueta y un rally con música en vivo el domingo, donde actuarán artistas de renombre.
El sábado se llevará a cabo una recepción para el gabinete, mientras que el domingo cerrará con una lujosa cena de gala en Washington D.C., encabezada por el presidente y los anfitriones.
Aunque estos eventos reflejan el lujo y la exclusividad del entorno presidencial, muchos ciudadanos destacan la limitada inclusión de sectores más amplios de la sociedad en estas celebraciones.
