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El estelar jardinero dominicano Juan Soto se reportó este domingo al campo de entrenamiento de los Mets de Nueva York, dejando claro desde el primer momento que el éxito del equipo no dependerá solo de él, sino del esfuerzo colectivo de toda la plantilla.
«No creo que tenga que ser ‘el tipo’», afirmó Soto en su primer encuentro con la prensa en el Clover Park de Port St. Lucie, Florida, donde los Mets se preparan para la temporada de Grandes Ligas. El toletero de 26 años, recién firmado por 765 millones de dólares por 15 años —el contrato más lucrativo en la historia del deporte profesional—, confía plenamente en el talento de sus nuevos compañeros.
Soto compartirá alineación con figuras de la talla del puertorriqueño Francisco Lindor, el poderoso Pete Alonso, su compatriota Mark Vientos y el venezolano Francisco Álvarez, entre otros. «Solo he escuchado cosas maravillosas sobre ellos. Veamos cómo va todo», expresó el dominicano, emocionado por esta nueva etapa bajo la dirección del venezolano Carlos Mendoza.
Compromiso sin presión extra
Pese a la magnitud de su contrato, Soto no se presiona para hacer más de lo que ya ha demostrado en sus siete años de carrera en las Grandes Ligas. «No estoy tratando de hacer más de lo que he hecho en el pasado», aseguró.
En la temporada pasada, el dominicano brilló con 41 cuadrangulares, 109 carreras impulsadas y un promedio de .288, además de liderar la Liga Americana en anotadas (128). Su rendimiento fue clave para llevar a los Yankees hasta la Serie Mundial, donde cayeron ante los Dodgers de Los Ángeles.
Ahora, en su nuevo equipo, su enfoque sigue siendo el mismo: «Simplemente voy a seguir siendo el mismo jugador, hacer lo que he estado haciendo año tras año», enfatizó Soto, consciente de la alta expectativa de la afición de los Mets.
Un primer día cargado de emoción
En su primera jornada con el uniforme de los Mets, Soto realizó ejercicios, compartió con sus compañeros y dejó ver parte de su poder con el madero en la caja de bateo, ante la mirada atenta de cientos de fanáticos que esperaban su llegada.
El dominicano inicia así un nuevo capítulo en su carrera, con la ambición de llevar a los Mets de Nueva York a lo más alto y devolverles el protagonismo en las Grandes Ligas.
