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El juicio por corrupción contra Alexis Medina Sánchez, hermano del expresidente Danilo Medina, sigue revelando nuevos detalles sobre el entramado de sobornos y tráfico de influencias que habría desfalcado al Estado dominicano con más de RD$4,500 millones.
En una declaración contundente y reveladora, el exgerente de Edeeste, Cristian Ramón Cabral, afirmó ante el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que recibió órdenes directas de Luis de León, cuñado de Medina Sánchez, para beneficiar a empresas vinculadas a este último en procesos de contratación dentro de la entidad.
Favores, información privilegiada y sobornos
Cabral, quien inicialmente fue presentado como testigo por la defensa de Medina Sánchez, terminó siendo asumido por el Ministerio Público, que lo interrogó bajo el principio de comunidad de pruebas. Durante su testimonio, confirmó que las empresas de Alexis Medina recibían información privilegiada, lo que les garantizaba adjudicaciones en licitaciones públicas.
Asimismo, reconoció que dentro de este esquema operaba una red de sobornos, en la cual él mismo recibió dinero. En su relato, también mencionó a Lewis Castillo, otro imputado que admitió su culpabilidad en la fase de instrucción y se acogió a un proceso penal abreviado.
El Ministerio Público refuerza su acusación con pruebas clave
A la salida de la audiencia, la fiscal Mirna Ortiz declaró que el Ministerio Público presentará en la fase final del juicio los cheques que evidencian los pagos ilícitos realizados tanto a Cabral como a Lewis Castillo.
Ortiz enfatizó que ya ha concluido la fase de presentación de pruebas, tanto del Ministerio Público como de las defensas, y que el tribunal ha establecido un calendario para la etapa de conclusiones.
“Una vez más demostraremos al tribunal por qué debe condenar a los acusados a las penas que este órgano acusador solicitará en su momento”, puntualizó Ortiz.
Con la contundencia de las pruebas presentadas, el caso Pulpo avanza hacia su desenlace, mientras el Ministerio Público reafirma su compromiso de desmantelar una de las mayores redes de corrupción en la historia del país.