|
Getting your Trinity Audio player ready...
|
El presidente de EE. UU. destacó los logros históricos del equipo campeón de la Serie Mundial 2024 y rindió homenaje a Shohei Ohtani, el primer jugador en alcanzar el club 50-50
Washington, D.C. — El presidente Donald Trump dio la bienvenida este lunes a los Dodgers de Los Ángeles, campeones de la Serie Mundial 2024, en una ceremonia especial celebrada en la Casa Blanca. El acto estuvo marcado por los elogios del mandatario hacia figuras destacadas como Shohei Ohtani, Mookie Betts y Teoscar Hernández, así como por algunas omisiones deliberadas de figuras políticas del Partido Demócrata.
Durante la ceremonia, Trump celebró el desempeño del equipo californiano, que conquistó el campeonato tras derrotar a los Yankees de Nueva York en cinco juegos. “Estas son personas muy talentosas. Es un honor tenerlos aquí”, expresó el presidente, quien no escatimó en halagos hacia los peloteros.
Shohei Ohtani, protagonista de la jornada
El foco de la celebración estuvo sobre Shohei Ohtani, a quien Trump calificó como “una estrella de cine” y pronosticó que “tiene un gran futuro”. Ohtani hizo historia al convertirse en el primer pelotero en los 149 años de la MLB en unirse al club 50-50, con más de 50 jonrones y 50 bases robadas en una misma temporada.
El presidente le estrechó la mano personalmente y resaltó su impacto en el béisbol estadounidense: “El mundo está viendo lo que hace este hombre. Es increíble”. Ohtani, que firmó el contrato más grande en la historia del deporte (10 años y $700 millones), posó junto al equipo en el Despacho Oval con una réplica de la Declaración de Independencia colocada por Trump en su retorno al poder.
Reconocimiento a figuras clave y gesto a Teoscar Hernández
Trump también destacó al lanzador japonés Yoshi Yamamoto, al MVP de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional Tommy Edman, y al estelar jardinero dominicano Teoscar Hernández, a quien saludó con afecto: “¿Estás teniendo una buena temporada también?”, le preguntó con una sonrisa.
Mookie Betts fue otro de los homenajeados. Trump, en tono irónico, lanzó una indirecta a los Medias Rojas de Boston por haberlo dejado ir en 2020. El jugador afroamericano, único del roster campeón en esa categoría, explicó previamente que asistir a la ceremonia fue una decisión difícil, pero que eligió celebrar con su equipo. “No quiero politizar esto. Es un privilegio estar aquí”, expresó Betts.
Ceremonia con notas políticas y simbólicas
En un gesto polémico, Trump evitó presentar a ciertos senadores demócratas presentes en la ceremonia: “Simplemente no me gustan particularmente, así que no los presentaré”, dijo. La celebración se desarrolló en medio de un lunes agitado para la bolsa estadounidense, tras declaraciones del presidente reafirmando sus aranceles.
También se dio en el contexto de críticas a su administración por la eliminación temporal de páginas del Departamento de Defensa que reconocían contribuciones históricas de minorías, como Jackie Robinson, ícono de los Dodgers de Brooklyn. Ninguno de estos nombres históricos fue mencionado en la ceremonia.
Trump recibe camiseta de los Dodgers y proyecta otro campeonato
Clayton Kershaw entregó al presidente una camiseta del equipo con el número 47, en alusión a que Trump es el 47.º presidente de EE. UU. El mandatario concluyó con optimismo sobre el futuro del equipo: “Después de ver cómo comenzaron esta temporada, puedo decirles que deberían planear regresar aquí el próximo año”.
Los Dodgers tienen un arranque de 9-2 y parecen encaminados a repetir su hazaña. La ceremonia marca la continuidad de una tradición en la que equipos campeones visitan la Casa Blanca. Antes, Trump ya había recibido a los Florida Panthers, campeones de la NHL, y próximamente espera a los Eagles de Filadelfia, campeones del Super Bowl.
