Getting your Trinity Audio player ready...
|
Londres.– El cantante británico Harry Styles ha recibido finalmente el visto bueno para llevar a cabo una ambiciosa transformación urbana en Hampstead, una de las zonas más exclusivas del norte de Londres. El proyecto, valorado en 30 millones de libras (unos 38 millones de dólares), consiste en unir dos propiedades contiguas del siglo XVIII, catalogadas como Grado II, para levantar una supermansión con estándares ecológicos y de conservación patrimonial.
Durante más de cinco años, Styles trabajó en esta propuesta que busca “devolverle su antigua gloria” a una vivienda histórica que fue dividida en los años 50 y modificada en los 70, alterando su valor arquitectónico original. El plan incluye restaurar el piso superior, eliminado en décadas pasadas, y conservar elementos originales como puertas paneladas, tragaluces y detalles en estilo Regencia.
La propiedad contará con espacios lujosos distribuidos estratégicamente: un piso exclusivo para el cantante con dormitorio principal, baño, múltiples vestidores, salón privado y patio interior; una planta de entretenimiento con cine, sala de juegos, piscina profunda, sauna y gimnasio; y un nivel completo destinado a huéspedes VIP, con cinco dormitorios y varias salas privadas.
Para avanzar con la construcción, Styles deberá cumplir con estrictos requisitos ambientales exigidos por el ayuntamiento de Barnet. Entre ellos, se incluyen accesos especiales para erizos en los jardines, casas para erizos y murciélagos, nidos artificiales para aves, hoteles para insectos y troncos muertos para conservar el hábitat de pequeños animales. También se instalarán paneles solares y bombas de calor para garantizar la sostenibilidad del proyecto.
El permiso otorgado exige que la obra inicie antes de mayo de 2025. En caso contrario, deberán realizarse nuevos y costosos estudios ambientales. El equipo del artista ya sostuvo reuniones con vecinos para presentar los detalles y mitigar el impacto en el tráfico y los servicios locales durante el desarrollo del proyecto.
Harry Styles, cuya fortuna supera los 220 millones de dólares, no es ajeno a las inversiones inmobiliarias. A los 18 años adquirió su primera casa en Hampstead y, desde entonces, ha invertido en propiedades en Hollywood Hills, Tribeca y en Civita di Bagnoregio, Italia.
El nuevo proyecto en Londres refleja, según su equipo, un profundo respeto por la historia del lugar y una visión moderna centrada en el diseño sostenible y la convivencia armoniosa con el entorno natural.