A pesar de las tensiones y conflictos que han rodeado la relación entre Angelina Jolie y Brad Pitt, ambos actores han demostrado ser padres presentes en la vida de sus hijos. Hoy, la atención se centra en Pax Jolie-Pitt, de 20 años, quien sufrió un fuerte accidente mientras paseaba en su bicicleta eléctrica en Las Vegas en julio pasado. El joven colisionó con un vehículo, lo que lo llevó a ser hospitalizado y a someterse a una cirugía.
Aunque fue atendido rápidamente por los médicos, Angelina Jolie decidió que su hijo recibiera tratamiento de los mejores cirujanos. Según fuentes cercanas a la familia, la actriz tomó cartas en el asunto y contactó a un cirujano plástico de renombre en Los Ángeles para que se encargara de evitar cicatrices permanentes en el rostro de Pax.
El joven reapareció junto a su madre hace unos días en el Festival de Cine de Toronto, donde fue visto usando gafas de sol, aunque se pudieron observar leves secuelas del accidente en su rostro.
Una fuente cercana a Jolie comentó: «Angie quería asegurarse de que Pax no tuviera una cicatriz terrible, por lo que organizó que uno de los mejores cirujanos plásticos lo examinara y tratara». Además, señaló que Angelina ha sido una madre sumamente implicada durante todo el proceso, estando presente en cada consulta médica para garantizar el mejor cuidado posible.
A pesar de lo preocupante que fue el accidente, especialmente para la familia, Angelina ha estado al frente de la recuperación de Pax, brindándole todo su apoyo. Según los cercanos a la familia, hoy Angelina siente tranquilidad al ver que su hijo está recuperándose satisfactoriamente.
Esta situación ha mostrado una vez más la devoción de Jolie como madre, quien no ha escatimado en esfuerzos para asegurar el bienestar de su hijo.
