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Washington, Estados Unidos – Las autoridades federales de Estados Unidos han alcanzado un acuerdo de compensación por más de 100 millones de dólares con las empresas singapurenses responsables del buque de carga que causó el derrumbe del puente Francis Scott Key, un enlace clave para la economía estadounidense. Las compañías Grace Ocean y Synergy Marine, propietarias y gestoras del portacontenedores Dali, han aceptado cubrir los costos derivados de las reparaciones y limpieza de los daños ocasionados.
El 26 de marzo, el buque Dali sufrió un fallo eléctrico al salir del puerto de Baltimore, quedando atrapado en el puente de la autopista. Esto provocó el colapso de la estructura y dejó inhabilitado el tráfico marítimo durante más de dos meses, hasta su reapertura el 10 de junio.
Costos Asumidos por las Empresas y no por Contribuyentes
Según un comunicado del Departamento de Justicia, Grace Ocean y Synergy Marine asumirán los costos de limpieza y restauración del canal Fort McHenry, lo que exime a los contribuyentes estadounidenses de cubrir los gastos. El fiscal Benjamin Mizer destacó que el acuerdo asegura que el Estado federal será compensado en su totalidad.
Tragedia y Demanda de las Familias de las Víctimas
El accidente tuvo consecuencias trágicas, con la muerte de seis trabajadores que realizaban labores de reparación en el puente. Todos ellos eran inmigrantes latinoamericanos, y sus familias han anunciado que emprenderán acciones legales separadas para obtener justicia y compensación por la pérdida de sus seres queridos.
Este acuerdo representa un avance importante en la rendición de cuentas por los daños causados, pero la tragedia humana que acompaña al incidente sigue siendo un tema sensible y de atención para las autoridades y la comunidad. En Portada Nacional continuaremos informando sobre el desarrollo de este caso y sus implicaciones para la comunidad latina en Estados Unidos.