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Magín Díaz, reconocido economista y exdirector de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), resaltó la necesidad urgente de una reforma fiscal en República Dominicana, una medida que ha sido postergada durante varios años. Según Díaz, aunque el gobierno intentó impulsarla en 2020 y 2021, las condiciones pandémicas hicieron imposible la aceptación de la población. En su discurso de toma de posesión, el presidente Luis Abinader subrayó que la reforma fiscal es una prioridad, y desde entonces, Díaz coincide en que el país no puede seguir posponiéndola indefinidamente.
Díaz explica que la economía dominicana presenta un «desequilibrio» en la cuenta fiscal, donde los ingresos no logran compensar los gastos públicos. Destacó que, aunque reducir el gasto es una opción, existen áreas críticas que requieren mayor inversión, como infraestructura vial, drenaje y carreteras, especialmente en las principales ciudades.
El economista argumenta que, aunque ningún cambio en el sistema fiscal es completamente aceptado, se trata de un esfuerzo compartido donde «todos tendremos que pagar más impuestos». Para Díaz, la clave está en que el gobierno pueda comunicar de manera efectiva los beneficios a largo plazo de una reforma, tales como una mejor calidad de los servicios públicos y un desarrollo urbano más robusto. «El gobierno debe vender la reforma a la población con el mensaje de que pagar más impuestos hoy significará mejores servicios en el futuro».
La Necesidad de un Cambio Estructural
Díaz también subraya que, durante las últimas dos décadas, el gobierno ha gastado sistemáticamente más de lo que ingresa, generando una deuda creciente que ahora exige nuevas fuentes de ingresos. Ante esta situación, apoya la implementación de la reforma como una solución integral, aunque advierte que «el diablo estará en los detalles», refiriéndose a los retos de implementar medidas que sean sostenibles y equitativas.
Cuando se le preguntó sobre su disposición a colaborar directamente con el gobierno en este esfuerzo, Díaz indicó que, aunque prefiere mantenerse en la academia y su práctica profesional, no descarta la posibilidad de brindar asesoría desde su experiencia. Añadió que el presidente Abinader, con quien mantiene comunicación ocasional, es un líder comprometido y desea dejar un legado positivo para el país.
Una Reforma Inminente, una Sociedad en Espera
A medida que la sociedad dominicana se enfrenta a decisiones fiscales difíciles, el mensaje de Magín Díaz es claro: «Entre más se posponga la reforma, más difícil será implementar las soluciones necesarias para el desarrollo económico y social». La clave estará en lograr un acuerdo colectivo que permita la estabilidad fiscal sin sacrificar las áreas que demandan inversión urgente.