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París, Francia – En un hecho sin precedentes desde 1962, la Asamblea Nacional francesa aprobó este miércoles una moción de censura contra el primer ministro Michel Barnier, apenas tres meses después de su nombramiento. Con 331 votos a favor, el Gobierno de Barnier se convierte en el más breve de la Quinta República, marcando un momento crítico en la política francesa.
El Uso del Artículo 49.3: Desencadenante del Conflicto
La destitución de Barnier se produce después de que este utilizara el controvertido artículo 49.3 de la Constitución francesa para aprobar, sin votación parlamentaria, el presupuesto de la Seguridad Social para el próximo año. Esta medida, anunciada el pasado lunes, buscaba sortear el estancamiento legislativo, pero generó una fuerte reacción de los partidos de oposición.
Mathilde Panot, portavoz de La Francia Insumisa (LFI), calificó la acción como un ejemplo de «caos político» y cuestionó la legitimidad del Gobierno, recordando los resultados de las elecciones legislativas, donde el bloque izquierdista Nuevo Frente Popular fue el más votado.
Apoyo Crucial de la Agrupación Nacional
Aunque la izquierda francesa lideró la moción de censura, su éxito dependió del respaldo de la ultraderechista Agrupación Nacional, que también votó a favor de la destitución. Este inesperado alineamiento subraya las divisiones en el panorama político francés y ha llevado a algunos sectores a pedir la dimisión del presidente Emmanuel Macron.
Barnier y su Advertencia sobre el «Caos Político»
En una entrevista previa a la votación, Barnier advirtió que su destitución podría agravar la ya complicada situación económica y social del país. Señaló que la incertidumbre política podría afectar la posición de Francia en los debates europeos y comprometer el avance de la Unión Europea en temas geopolíticos clave.
La incertidumbre ya ha impactado negativamente el mercado bursátil francés y amenaza con elevar las tasas de interés, exacerbando los desafíos de la deuda pública del país.
Un Gobierno Marcado por la Inestabilidad
El breve mandato de Barnier comenzó el 5 de septiembre, tras la dimisión del entonces primer ministro Gabriel Attal, quien dejó el cargo luego de los resultados adversos de las elecciones legislativas. A pesar de haber sobrevivido a una moción de censura en octubre, el Gobierno de Barnier no pudo superar el desafío actual, dejando a Francia en una situación de inestabilidad política sin un claro sucesor inmediato.
Un Momento Decisivo para Francia
Con la oposición pidiendo la dimisión del presidente Macron y el país enfrentando una creciente presión económica y social, el futuro político de Francia se presenta incierto. Este episodio marca un punto de inflexión en la Quinta República, mientras los líderes nacionales e internacionales observan de cerca cómo el país maneja esta crisis histórica.
