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CARACAS, VENEZUELA – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó este miércoles a sectores de la oposición y a potencias extranjeras de estar detrás de lo que denominó un «segundo llamado a la guerra civil», tras la captura de un grupo de presuntos mercenarios extranjeros en el estado Zulia. Según el mandatario, estas acciones buscan desestabilizar al país a pocos días de su investidura para un nuevo mandato.
«Intentos desesperados de sabotaje»
Maduro, en una transmisión nacional desde el Palacio de Miraflores, aseguró que los mercenarios tenían como objetivo realizar actos de sabotaje contra instalaciones estratégicas, incluido el sistema eléctrico nacional. «Estamos enfrentando una conspiración que busca fracturar la paz de la patria y desatar el caos. Este es un segundo llamado a la guerra civil que no vamos a permitir», afirmó el mandatario.
El líder venezolano no dio detalles sobre las identidades de los detenidos, pero señaló que se trata de un grupo «entrenado y financiado en el extranjero». Aseguró que los organismos de inteligencia del país están investigando los nexos de los capturados con figuras de la oposición.
Tensión política en aumento
Las declaraciones de Maduro llegan en un contexto de alta tensión, marcado por las protestas convocadas por la oposición liderada por María Corina Machado, quien acusa al presidente de haber cometido fraude en las elecciones del 28 de julio. Machado ha llamado a movilizaciones masivas este jueves, demandando que se reconozca como ganador al líder opositor Edmundo González Urrutia.
Por su parte, el oficialismo ha convocado a sus simpatizantes a realizar contramarchas para «defender la revolución».
Reacciones internacionales
La captura de los presuntos mercenarios y las acusaciones de Maduro han generado reacciones divididas en la comunidad internacional. Mientras que aliados como Rusia y Cuba han respaldado al presidente venezolano, denunciando «injerencias extranjeras», países como Estados Unidos y miembros de la Unión Europea han pedido investigaciones independientes para esclarecer los hechos.
Preparativos para la investidura
A pesar de la crisis, Maduro aseguró que la ceremonia de investidura, programada para este viernes, se llevará a cabo como estaba planeada. «El pueblo bolivariano no se rinde. Seguiremos adelante con nuestro proyecto de paz y soberanía», concluyó.
Con las calles de Venezuela en estado de alerta y las protestas previstas para las próximas 24 horas, el clima de incertidumbre y confrontación continúa escalando, dejando al país en un momento crítico.