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Después de más de un año de un conflicto devastador, el cese al fuego entre Israel y Hamás entrará en vigor este domingo, ofreciendo una pausa al conflicto de 15 meses entre ambas partes en la Franja de Gaza.
Este acuerdo representa un avance significativo, pero su implementación está llena de desafíos. Implica la coordinación entre grupos militantes palestinos, la Cruz Roja Internacional, el ejército israelí, mediadores internacionales y un gobierno israelí bajo presión interna, con ministros de línea dura expresando su desaprobación.
Una luz de esperanza en Gaza e Israel
En Gaza, donde el 90% de la población ha sido desplazada por intensos bombardeos, el anuncio del alto el fuego ha traído un leve alivio. La mayoría del territorio está en ruinas debido a los ataques aéreos y terrestres. En Israel, familias enteras esperan ansiosamente el regreso de sus seres queridos, tomados como rehenes durante el ataque transfronterizo del 7 de octubre de 2023, que marcó el inicio de la guerra. Según Israel, 98 rehenes permanecen en Gaza, aunque se desconoce su estado actual.
Los primeros pasos: ¿Qué sucederá el domingo?
El alto el fuego se iniciará a las 8:30 a. m. hora local (06:30 GMT). Ese mismo día, tres rehenes serán liberados por Hamás a partir de las 4:00 p. m. (14:00 GMT), y en respuesta, Israel liberará a 95 prisioneros palestinos, principalmente mujeres y menores. Sin embargo, hasta la noche del sábado, Hamás no había proporcionado los nombres de los rehenes, lo que añade incertidumbre a la implementación del acuerdo.
Mientras tanto, las tropas israelíes mantendrán posiciones estratégicas dentro de Gaza, y cientos de camiones con ayuda humanitaria intentarán ingresar al territorio devastado. El cruce de Rafah, principal vía de acceso a Gaza, comenzará a operar pronto, según las autoridades egipcias.
La primera semana del acuerdo
Si el cese del fuego se mantiene, el 25 de enero marcará un segundo intercambio: cuatro rehenes más serán liberados por Hamás a cambio de entre 30 y 50 prisioneros palestinos por cada rehén. Este intercambio irá acompañado del repliegue parcial de las tropas israelíes, permitiendo que los desplazados del norte de Gaza regresen a sus hogares.
Los acuerdos de seguridad, incluyendo inspecciones a palestinos que se desplacen hacia el norte, todavía están siendo negociados. Durante cada intercambio, Israel verificará la llegada segura de los rehenes antes de liberar a los prisioneros palestinos.
Las semanas siguientes: Intercambios y negociaciones
En la primera fase del acuerdo, de seis semanas de duración, Hamás liberará 33 rehenes a cambio de casi 2,000 prisioneros palestinos. Este periodo estará marcado por un frágil equilibrio, mientras las partes intentan evitar una reanudación de las hostilidades.
El futuro, sin embargo, es incierto. Durante la tercera semana del alto el fuego, comenzarán las negociaciones para la «Fase 2», orientadas a poner fin a la guerra de manera definitiva. Sin embargo, tanto Israel como Hamás han establecido condiciones contradictorias que dificultan un acuerdo final.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha insistido en la necesidad de mantener la capacidad militar frente a posibles futuros conflictos. Mientras tanto, muchas familias temen que sus seres queridos puedan quedarse atrás si las negociaciones fracasan.
Reflexión final
Aunque este alto el fuego representa un respiro en medio de la devastación, la complejidad y fragilidad del acuerdo destacan los profundos desafíos para alcanzar una paz sostenible. La atención mundial estará puesta en los próximos días y semanas, mientras las partes intentan superar las tensiones históricas en búsqueda de un cese definitivo al conflicto.