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El exsenador estadounidense Bob Menéndez enfrentará sentencia el próximo 29 de enero tras ser acusado nuevamente de corrupción, en un caso que ha reavivado el interés sobre sus controvertidas conexiones con la República Dominicana y figuras clave en temas de seguridad y negocios en el país caribeño.
Uno de los episodios más destacados de su historial es su relación con el oftalmólogo dominicano Salomón Melgen, quien estuvo en el centro de un escándalo relacionado con un contrato para la inspección de contenedores en los puertos dominicanos. Según acusaciones de 2015, Menéndez habría utilizado su influencia política para presionar a funcionarios estadounidenses en favor de los intereses de Melgen, a pesar de la oposición de las autoridades dominicanas que consideraron el contrato perjudicial para el país.
Melgen, amigo cercano y donante político de Menéndez, fue condenado en 2017 por un esquema de fraude al sistema de Medicare que superó los 73 millones de dólares, uno de los mayores casos de fraude médico en la historia de Estados Unidos. Sin embargo, recibió un indulto del expresidente Donald Trump en 2021, una decisión que desató controversias por los vínculos entre ambos y el apoyo de figuras influyentes que promovieron la liberación de Melgen.
El caso de los puertos dominicanos ha sido particularmente polémico. Melgen habría ofrecido regalos lujosos, como viajes en jet privado y estadías en resorts exclusivos, al senador Menéndez a cambio de favores políticos. Aunque Menéndez argumentó que su respaldo al contrato se debía a preocupaciones de seguridad, narcotráfico y comercio, los fiscales señalaron que sus acciones buscaban beneficiar directamente a su amigo y donante.
En 2017, Menéndez fue llevado a juicio por estas acusaciones, pero el proceso terminó sin un veredicto debido a la falta de consenso en el jurado. A pesar de esto, el episodio dejó una mancha en su carrera política, especialmente por el impacto estratégico de los puertos dominicanos en la región.
En la República Dominicana, el caso también ha generado interés, dado que los puertos son cruciales para la seguridad nacional y el comercio del país. Aunque el contrato portuario defendido por Melgen nunca llegó a concretarse, el intento de influencia de Menéndez ha sido visto como un ejemplo de cómo intereses externos pueden buscar aprovecharse de la infraestructura estratégica dominicana.
Figuras locales han seguido de cerca las acusaciones contra Menéndez, recordando además sus posturas sobre asuntos políticos y económicos en el país, como su oposición a la reelección del expresidente Danilo Medina en 2019. La sentencia del exsenador promete ser un nuevo capítulo en una saga que ha dejado huella tanto en Estados Unidos como en la República Dominicana.