POR
CÉSAR DALMASÍ
La vida es cambiante y está siempre en constante movimiento y lo que ayer era ya hoy no existe, sin embargo muchos aspectos de la vida o de la esencia humana en éste caso, han de mantenerse inmutables e imperecederos, como son todos los valores humanos, los cuales nos garantizan una verdadera satisfacción material y espiritual.
Hoy día en los tiempos de la revolución digital y la inteligencia artificial, cuando el sentir y el pensamiento humano ha ido cambiando y en donde lo más importante es cualquier cosa que podamos imaginar, en donde lo humano no importa y carece de valor.
Por eso cuando alguien es honesto y actúa bajo ese principio, vive bajo un asedio social terrible, escuchando epítetos y calificativos desagradables como, tú lo que eres es un buen pendejo, e incitándole a que se desvíe de sus principios y que se Monte en el riel de lo inmoral.
Y esto me da oportunidad para volver a mencionar al joven Michel Antonio Céspedes a quién nunca he visto, un honorable miembro del Cuerpo Especializado para la Seguridad del Metro de Santo Domingo CESMET, quien en un acto de honestidad y mientras estaba en su servicio encontró un bulto conteniendo más de medio millón de pesos dominicanos y su primera acción fue llamar a sus superiores para que se contacte al dueño y se le entregue, lo que exactamente hicieron, se le devolvió el pequeño bulto con su contenido a su dueño, que resultó ser una señora que había tomado un préstamo, según testificó la misma señora.
Acto como el que hizo Michel Antonio Céspedes, ha pasado en otras ocasiones con otros miembros de las fuerzas armadas y de la policía nacional; por eso es justo reiterar que dentro de nuestras instituciones castrenses y policial la gran mayoría son personas, decorosas, decentes y altruistas, aunque se pueda conocer algún casos aislados que haga lo contrario.
De manera que el valor de ser honesto implica vivir entre aplausos y rechazos, unos pocos desaprueban la honestidad mientras otros saludan y aprecian acciones como la del agente de referencia; es saludable la acción de honestidad de Michel Antonio Céspedes especialmente en el momento histórico que vive el mundo.
Eso nos hace reflexionar y reconocer que no todo está perdido, todavía hay una gran parte de la sociedad que es sana, honesta, que tiene principios y formación, le aseguro que si buscamos sobre la crianza del referido agente, nos encontraremos con que viene de una familia también sana y de grandes valores y principios; por eso los padres y tutores de este tiempo debemos educar y criar para provocar que en el futuro podamos exhibir una sociedad verdaderamente honesta.
Y es que el valor de la honestidad no tiene precio, pero el precio de la honestidad tiene un valor tan alto como la misma dignidad humana, que no hay manera de que se pueda comprar ni vender.
Sigamos siendo honesto desde lo simple a lo más complejo, como eximirnos de no mentir aunque sea mentira rosa como muchos dicen, la mentira es mentira, no tiene medida y es única como la traición, el engaño y la falsedad o cualquier otro bajo sentimiento, lo malo es malo y será siempre malo, como por igual lo bueno también lo será siempre.
Así que a ese agente del CESMET Michel Antonio Céspedes le digo, aunque te señalen y te digan lo que sea, sigue siendo honesto, no escuches la voz perversa y execrable de los que quieren que tú te conviertas en uno de ellos y menciono el nombre de Michel, porque todos debemos ser Michel en nuestros actos de honestidad, en el entorno en que nos encontremos.
Sé que muchos podrían estar pensando que lo correcto es hacer lo bueno y listo, sí, estoy de acuerdo, pero ante la realidad de la sociedad en que hoy vivimos, creo que se aporta mucho para el bien de todos sobresaltando acciones como el agente de referencia, que por cierto me imagino que lo han ascendido al próximo rango que le corresponda.
Quiero que sepas Michel Antonio Céspedes que la recompensa de los buenos siempre llega como por igual la de los del otro grupo al cuál tú no perteneces; ese acto de Michel saca a la luz publica la realidad concreta del personal que componen las fuerzas armadas y la policía nacional de República Dominicana, que cuentan dentro de sus filas con muchos Michel. Y tú eres un Michel?