Israel fue notificado el viernes de su inclusión en la «lista de la vergüenza» de la ONU, que denuncia violaciones a los derechos de los niños durante conflictos, según fuentes diplomáticas. En esta lista también figurarán los grupos Hamás y Yihad Islámica. El secretario general de la ONU publica anualmente un informe que detalla violaciones de los derechos de los niños en diversas zonas de conflicto y señala a los responsables en un anexo conocido como la «lista de la vergüenza». Esta lista incluye casos de niños asesinados y mutilados, reclutamiento, secuestro y violencia sexual.
El próximo informe se espera para finales de junio, pero el embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, anunció que el jefe de gabinete del secretario general le había notificado la incorporación de Israel a la lista. «Estoy profundamente conmocionado y disgustado por esta vergonzosa decisión del secretario general», declaró Erdan en un video difundido en su cuenta en la red social X. «Es una decisión inmoral que ayuda al terrorismo y recompensa a Hamás», añadió. El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu también reaccionó en X, afirmando que «la propia ONU se incluyó a sí misma en la lista negra de la Historia» y defendiendo que «el ejército israelí es el ejército más moral del mundo».
El portavoz de Guterres confirmó que había conversado con el embajador israelí en el marco de una «llamada de cortesía» habitual cuando un país es incluido en la lista. Una fuente diplomática informó que Hamás y la Yihad Islámica, otro movimiento armado palestino, también serán incluidos en la lista.
El año pasado, las fuerzas armadas rusas y grupos armados «afiliados» a Moscú fueron agregados a la «lista de la vergüenza» de la ONU, pero no fue el caso de Israel, lo cual generó consternación entre las organizaciones de derechos humanos que llevan años pidiendo su inclusión. «Es algo completamente justificado» que se haya incluido a Israel este año, «aunque debería haberse hecho hace ya mucho tiempo», comentó Louis Charbonneau, de Human Rights Watch, a la AFP.
La ONU había advertido en su informe de 2022 que Israel sería incluido en la lista si no se observaba ninguna mejora. El reporte del año pasado señaló «una disminución significativa en el número de niños asesinados por las fuerzas israelíes, incluso en ataques aéreos», entre 2021 y 2022. Sin embargo, la situación cambió con la guerra entre Israel y Hamás, desencadenada el 7 de octubre por un ataque sin precedentes de los palestinos contra Israel, que resultó en la muerte de 1.194 personas, la mayoría civiles, según datos oficiales israelíes.
En respuesta a ese ataque, el ejército israelí lanzó una ofensiva mortal en la Franja de Gaza, donde al menos 36.731 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, han muerto, según el último informe del viernes del Ministerio de Salud de Gaza.
